La salud es lo más importante y, sin duda, el cuidado de nuestra boca juega un papel fundamental para la salud general.
La OMS advierte de la importancia de prevenir a través de hábitos saludables las enfermedades bucodentales. Algunos de sus consejos son:
- Cepillarse los dientes al menos dos veces al día con pasta dental con flúor
- Tener revisiones regulares con el odontólogo, tanto en niños como en adultos
- Evitar los dulces y golosinas
- Evitar el alcohol y el tabaco
- Usar regularmente el hilo dental y los enjuagues bucales
- Evitar las bebidas gaseosas, zumos y bebidas azucaradas
Visitar al dentista ¿por qué?
Los expertos señalan que con buenos hábitos y chequeos regulares se podrían prevenir la mayoría de los problemas de salud oral.
Conviene visitar al dentista por…
- Salud. Las enfermedades relacionadas con las encías pueden tener como consecuencia la pérdida de piezas dentales, por no hablar de caries, placa bacteriana, gingivitis, que son solo la punta del iceberg.
- Prevención. Acudir regularmente al dentista es la clave para no tener que someterse a intervenciones dentales agresivas.
- Higiene. La higiene juega un papel fundamental en la salud de la boca. El cepillado, el hilo dental, los colutorios utilizados regularmente alejan las posibles enfermedades dentales.
- Estética. El dentista no solo te ayuda a mantener tu boca sana sino también una sonrisa bonita. Esto puede ser clave para mejorar la autoestima del paciente.
- Ahorro. Cumplir con las revisiones periódicas del dentista y por lo tanto tener una boca sana, nos supondrá un menor gasto de dinero.
- Dar un buen ejemplo a tus hijos. Fomentar desde edades tempranas los hábitos saludables y las visitas frecuentes al odontólogo ayudan a crear una imagen positiva del dentista. Las estadísticas son alarmantes: con 3 años, el 50% de los niños tienen ya algunas caries en la boca.
Un dato que revela la importancia de que los padres promuevan hábitos de salud correctos que favorezcan su salud general.