30 octubre 2019

Insistimos mucho en el cuidado de los dientes, por ello queremos hablar hoy de la caries dental, probablemente uno de los problemas más habituales en nuestra salud dental. La educación que recibimos al respecto tiene mucho que ver con su tratamiento y prevención.

Es cuestión de ser conscientes de que la caries dental puede afectar a otras partes del organismo, y de habituarnos a asistir al dentista y mantener una buena higiene dental. Estas son claves para notar la diferencia.

Cómo prevenir la caries dental

Resultado que cepillarnos los dientes tres veces al día es insuficiente, a no ser que se haga de forma correcta y empleando unos complementos adecuados como el hilo dental o el enjuague bucal. En el caso de consumir comida entre horas, se recomienda prestar mucha atención a la higiene.

Sobre todo, si se ingieren alimentos con altas concentraciones de carbohidratos, azúcares o almidones. Es importante seguir unas pautas adecuadas para mantener un buen nivel de salud dental.

1. El cepillado

Se debe tener una cuidada rutina a la hora de cepillar los dientes. Debe ser realizada de forma lenta, con cierta suavidad y en sentido vertical (de arriba abajo). Es importante no olvidarnos de realizar una limpieza por la cara interna y externa de cada pieza dental.

Aconsejamos prestar especial atención a los espacios que existen entre los dientes, así como a las líneas de las encías. Se trata de zonas más inaccesibles por lo que es muy común que se acumulen una mayor cantidad de residuos y bacterias.

2. Conviértelo en rutina

Es necesario que la rutina de limpieza se convierta en un hábito para lograr que cada zona quede cubierta.

3. La lengua

Se trata de un punto frecuentemente olvidado durante el cepillado. Ésta también debe ser cepillada desde atrás hacia delante.

4. Cepillo eléctrico

Tenemos muchas opciones de cepillos, pero los odontólogos recomendamos utilizar los cepillos eléctricos debido a que tienen una mayor capacidad para acceder a cualquier rincón de nuestra boca.

5. Renueva tu cepillo

En el caso de optar por un cepillo eléctrico lo más recomendable es que se renueve, o por lo menos se renueve el cabezal, cada tres meses.

6. Hilo dental

Se trata del último paso del ritual de limpieza, utilizarlo hará que nuestra limpieza se realice de forma efectiva. Lo introduciremos dentro de los espacios interdentales con cierta firmeza y con delicadeza.

7. Enjuague bucal

Una vez realizada la limpieza, deberemos aplicar enjuague bucal. Lo más recomendable es que no se enjuague la boca con agua después de utilizarlo.

8. Haz una visita a tu odontólogo

Visitar a tu odontólogo/a dos veces al año para someternos a una limpieza dental en profundidad se vuelve algo imprescindible para prevenir la caries.