14 enero 2021

Sí, el estrés es algo muy nocivo para la salud general de las personas, eso ya lo sabías ¿cierto? Pero, ¿sabías que el estrés también es malo para tus dientes?

La ansiedad, los nervios… pueden afectar a todo el cuerpo: desde la piel, el estómago y hasta la boca y los dientes. ¡Sí! ¡Tus dientes también sufren cuando estás estresado! Hoy te explicamos tres razones por las que el estrés puede estropearte la boca y los dientes.

¿Cómo afecta el estrés a tus dientes?

El estrés  tiene un gran efecto, negativo, en tu higiene bucal. Un estado de estrés puede hacer que descuides tu cuidado personal y de tu higiene dental.  Esto no significa que dejes de cepillarte, pero si que le dediques menos tiempo y cuidado del necesario. Creemos que no es necesario, pero te recordamos lo importante que es el lavado de dientes, sobre todo tras las comidas. Y por lo menos, una vez al día, realizar un cepillado más exhaustivo utilizando el hilo dental. No hacerlo implica, entre otros efectos negativos, la generación de una placa de bacterias en los dientes y las encías. Estas bacterias son las causantes de la caries y de la inflamación de encías.

Abuso de azúcares, alimentos procesados, tabaco y alcohol. Es más normal que descuides tu alimentación, llegando a abusar de azúcares y alimentos procesados. Además, en muchas ocasiones van de la mano con el aumento en el consumo de tabaco y alcohol. Los malos hábitos mencionados son considerados enemigos de nuestra salud bucal, ya que son culpables del desarrollo de muchos tipos de problemas. Desde caries hasta cáncer de boca.

  • El azúcar daña los dientes ya que hace que las bacterias produzcan el ácido que finalmente daña los dientes. Es decir que cuanto más azúcar consumamos, más ácido creará en nuestra boca.
  • El tabaco no solo nos causará daños estéticos si no que puede causar enfermedades como halitosis crónica o graves enfermedades periodontales o de las encías.
    El alcohol afecta sobre todo por la erosión dental y la reducción de flujo salival que genera ya que el alcohol actúa sobre las glándulas salivares reduciendo la producción de saliva y provocando serios problemas en nuestra salud bucodental.

¿Sientes tensión en los músculos de la cara y cuello al despertarte? ¿Sensibilidad en las muelas por la mañana? Seguramente sea debido al bruxismo o apretamiento dental.  Se trata de un efecto del estrés que carga los efectos nerviosos directamente sobre los dientes y muelas. De esta forma, apretamos los dientes por estrés durante el día, pero sobre todo mientras dormimos.

Existen estudios que revelan que cerca del 70% de la población de nuestro país la padece, y no hay que descuidarse, ya que si no se coge a tiempo puede llegar a provocar lesiones permanentes. Este hábito puede causar el desgaste de la superficie dental, dolores de cabeza, y dolores musculares a nivel facial y mandibular.

¿Cómo se evitan problemas en dientes causados por el estrés?

La prevención es siempre la mejor solución. Las tres mejores herramientas para cuidar la salud de tu boca son: llevar una buena higiene oral, tener una buena alimentación reduciendo los hábitos nocivos como el consumo de tabaco y alcohol y acudir a revisiones periódicas con tu dentista.

Y por supuesto, reducir el estrés de nuestro día a día, siempre que esté en nuestras manos. De no ser así acudir a un especialista para aliviarlo.